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GESTIÓN DE
Espacios
ARTÍCULO TÉCNICO
des ‘espaciales’ en este momento nada
tienen que ver con las que teníamos
hace unos años, cuando se imponía el
trabajo presencial, y están en continuo
cambio. En líneas generales, los profe-
sionales no quieren despachos priva-
dos ya que para eso cuentan con mo-
mentos de trabajo individual donde
cada uno elige (casa, hotel, aeropuer-
to, cafeterías), sino tener libertad y fle-
xibilidad y encontrar soluciones den-
tro de la propia empresa. El sentido
de pertenencia desaparece en las ofi-
cinas actuales.
La flexibilidad es la clave para hacer
del lugar de trabajo una herramien-
ta esencial y de apoyo para el pro-
fesional. Lugares que propicien la co-
laboración y el corporativismo, espa-
cios que empujen el trabajo en equi-
po, zonas en las que poder trabajar
concentrado sin interrupciones, áreas
de ocio y relax, zonas que favorezcan
las conversaciones y la comunicación
interna entre empleados y departa-
mentos -sin olvidar, cuando la presen-
cia no es necesaria-, lugares fuera de
la oficina para seguir trabajando de
forma productiva con las herramien-
tas adecuadas.
Además la sede corporativa debe
convertirse en un lugar ya no sólo para
empleados de la propia empresa, sino
también abierto a clientes o colabora-
dores con los que compartir conoci-
miento e intercambiar experiencias.
de organizaciones con jerarquía pira-
midal, donde unos pocos en la par-
te superior ejercen el poder sobre la
mayoría, que son los que tienen las
ideas, conocimientos y experiencia.
En lugar de construir nuestras organi-
zaciones basadas en el control, la sos-
pecha y el secreto, tenemos que em-
pezar a dar libertad y creer que todo
es posible. Sólo entonces podremos
crear organizaciones simples, mejo-
res, humanas”.
Ante esta situación, las compañías
deben plantearse la reorganización y
rentabilidad de sus espacios corpora-
tivos, y alinear las necesidades actuales
de los profesionales con la cultura y es-
trategia corporativa.
Las sedes juegan un papel relevante
en esta alineación, ya que las necesida-
bajar, sino como lugar de encuentro,
de comunicación, de colaboración, de
vivir experiencias..., éste es el presen-
te del trabajo y aún muchas empresas
no se han planteado un cambio. Las
oficinas tradicionales categóricamente
no sirven. La transformación que esta-
mos viviendo en las nuevas formas de
trabajo, condicionan la transformación
espacial de las empresas, con nuevos
usos de los espacios de trabajo.
Fidelizar y cuidar la empleabilidad,
retener el talento, crear cultura cor-
porativa, gestionar el cambio, conci-
liar vida personal/profesional, fomen-
tar el consumo sostenible, emocionar,
y otros aspectos ahora tan importan-
tes, forman parte del proyecto apasio-
nante de las nuevas empresas, las nue-
vas sedes y las nuevas formas de tra-
bajo. La sede corporativa debe ser el
vehículo para conseguirlos.
El británico Andy Swann, experto
ponente en Workplace Conference,
explica claramente la situación: “Hay
más de 7 mil millones de personas en
este planeta y no hay dos iguales. Así
que, ¿por qué seguimos clasificando a
la gente en puestos de trabajo gené-
ricos en lugar de seleccionarlos para
nuestras organizaciones en base a lo
que son y lo que pueden ofrecer?”.
“Cada organización existe exclusiva-
mente para poner a las personas ade-
cuadas en el lugar correcto, haciendo
lo correcto. Tenemos que olvidarnos
Imágenes de la sede de L’Oreal en
Perú.