El sector de la climatización está evolucionando rápidamente en los últimos años, desde sistemas tradicionales basados en unidades centralizadas hacia soluciones más flexibles como los sistemas VRV (Volumen de Refrigerante Variable).
Se trata de sistemas clave para el control de la climatización en edificios terciarios permitiendo controlar, de manera independiente, la temperatura en cada estancia, enfocándose en maximizar la eficiencia operativa en condiciones reales maximizando también el confort del usuario. Sin embargo, es importante no olvidar el impacto medioambiental en cualquier tipo de sistema de climatización, una realidad que es necesario tener en cuenta en el diseño de nuevos equipos de cara a la instalación en nuevos edificios.
En este sentido, los gases refrigerantes son una pieza clave. Además de ser fundamentales para la operatividad de estos sistemas de climatización, también lo son para reducir las emisiones directas e indirectas en las grandes construcciones. Estos gases, que pueden ser tanto refrigerantes naturales como sintéticos, son responsables de la transferencia de calor dentro de los sistemas de climatización de expansión directa. Funcionan absorbiendo el calor del ambiente interior cuando pasan de estado líquido a gaseoso y viceversa a diferentes presiones y temperaturas, lo que les permite absorber y liberar calor de manera eficiente entre el interior y el exterior del edificio e incluso entre distintas estancias con necesidades opuestas de climatización.
Nuevos límites normativos para los refrigerantes
Entre los refrigerantes más comunes se encuentran los gases fluorados, que son ampliamente utilizados debido a su eficiencia. Estos gases tienen un alto potencial de calentamiento atmosférico (PCA) en caso de fuga, por lo que su uso está regulado por normativas internacionales y locales para minimizar su impacto ambiental. Es por eso por lo que la normativa actual de estos gases fluorados (UE 2024/573) intenta acelerar la reducción del consumo de HFC de nueva producción gracias a un plan de reducción gradual cada vez más estricto. El objetivo de esta normativa es avanzar hacia refrigerantes con un PCA cada vez más bajo como el R-32 (675) y el R-744 (1), reducir la carga de refrigerante y aumentar la reutilización de refrigerantes gracias al reciclado o incluso a la regeneración de éstos. Para conseguir este objetivo se han introducido límites máximos de PCA para los refrigerantes utilizados en los productos de climatización.
Los sistemas que utilicen un refrigerante con un valor PCA igual o superior al valor límite definido no podrán seguir comercializándose a partir de una determinada fecha límite, que varía en función del tipo de sistema. Los productos ya comercializados en la UE antes de la fecha límite podrán seguir vendiéndose, instalándose, utilizándose y recibiendo mantenimiento durante toda su vida útil.
Este enfoque tiene como objetivo la introducción gradual de nuevos refrigerantes.
La normativa actual de gases fluorados busca avanzar hacia refrigerantes con un PCA cada vez más bajo.
Mayor rentabilidad en el uso de sistemas VRV
Concretamente, en equipos de expansión directa partidos de más de 12 kW entre los que se encuentra toda la gama de VRV de Daikin, el límite futuro para la comercialización de este tipo de equipos entrará en vigor el 1 de enero del 2029 y se establece en un PCA máximo de 750. Debido a esta normativa, todos los fabricantes de equipos de expansión directa de VRF deberemos dejar de comercializar equipos con R410A (PCA de 2088) y nos obliga a desarrollar equiposmás sostenibles. Podríamos decir que el mercado ya ha adoptado el R32 (PCA de 675 – A2L) como el standard para cumplir con la normativa futura. El R32 continúa siendo el refrigerante equilibrado para muchas aplicaciones en los próximos años, lo que permitirá una mayor adopción de las bombas de calor de forma rentable.
¿Y cuál es el refrigerante en VRF para futuros desarrollos a 8 o 10 años? Daikin, para la siguiente generación de VRV apuesta por el R744, o lo que es lo mismo CO2 cuyo PCA es de tan solo 1 siendo un refrigerante catalogado como A1. El R744 es un refrigerante con un PCA ultrabajo que ya se utiliza en muchos sistemas de frío industrial, el cual ofrece una solución prometedora a largo plazo para los sistemas de climatización comerciales medianos y grandes. Una solución que merece toda la atención de las partes interesadas en el mercado de la climatización: fabricantes de componentes y de climatización, así como sus socios instaladores, con el objetivo de trabajar en la próxima generación de sistemas de climatización.
Eficiencia y sostenibilidad
Desde Daikin, estamos trabajando en investigar y seleccionar el refrigerante óptimo para cada aplicación, equilibrando cuatro factores clave: seguridad, eficiencia energética, impacto medioambiental y coste a lo largo del ciclo de vida del producto.
Daikin lanzará en junio de este mismo año una nueva solución de VRV con refrigerante CO2, representando un avance crucial para el futuro de los sistemas VRF dentro de la necesidad de descarbonización del sector de las instalaciones. Esta innovación proporciona una solución eficiente y sostenible para la climatización de edificios. El uso del refrigerante R-744 (CO2) ofrece varias ventajas importantes, pues se trata de un refrigerante natural presente en la atmósfera, clasificado como no inflamable (A1) según la normativa ISO817, y con un Potencial de Calentamiento Atmosférico (PCA) de 1, el mejor valor posible. Estas características hacen del R-744 una opción segura y sostenible para aplicaciones de climatización.
El uso de refrigerantes más respetuosos con el medio ambiente cubre una amplia gama de aplicaciones para descarbonizar edificios.
Diseñada para fomentar la descarbonización
El nuevo sistema VRV con CO2 mantiene todas las ventajas inherentes a los sistemas VRV: es rápido y fácil de diseñar e instalar, y ofrece un control preciso de zonas con tiempos de respuesta rápidos. La introducción en el mercado del sistema VRV con CO2, ya certificado por Eurovent, junto con la emblemática unidad Round Flow de casete y las unidades inverter de media y alta presión de conductos, marcará un hito importante en la evolución del mercado de VRV/VRF en Europa.
En este caso, se trata de una solución de refrigerantes diseñada para ayudar en el proceso de descarbonización en aplicaciones muy específicas como son los supermercados y establecimientos minoristas, enfocándose en sistemas de calefacción y refrigeración que requieren el uso de refrigerantes naturales.
Este es un primer paso para concienciar al mercado de la necesidad de trabajar y actualizar los equipos con mayor frecuencia que en los últimos años. Hasta la fecha, la tecnología VRV ha contribuido significativamente a la reducción de emisiones de CO2 en comparación con otras soluciones de calefacción basadas en combustibles fósiles. El uso de refrigerantes más respetuosos con el medioambiente como R-32, y en un futuro de CO2, cubren una amplia gama de aplicaciones para descarbonizar edificios, priorizando criterios de selección relacionados con el medio ambiente, la eficiencia, la huella de carbono y las emisiones a lo largo del ciclo de vida, sin olvidarnos del coste de implementación y el coste operativo.
Solución actual de VRV: VRV-5 de R32
Los modelos VRV-5 están diseñados específicamente para ayudar a reducir significativamente la huella de carbono de los edificios comerciales. Daikin, adelantándose a la prohibición ya comentada por la cual se restringe en 2029 el lanzamiento de productos con R410A, ya tiene la gama completa con R-32, la cual no es sólo un cambio de refrigerante, sino toda una evolución en todos y cada uno de los aspectos en los que destacan los sistemas VRV: eficiencia, confort, flexibilidad de instalación y soluciones integradas para satisfacer las necesidades de cualquier instalación y cliente. Además, cabe destacar el aumento de la seguridad en esta nueva generación de refrigerantes. Incluyen de serie sensores de fuga en todas y cada una de sus unidades interiores, así como válvulas de corte que actúan automáticamente para confinar todo el refrigerante en caso de fuga, cumpliendo así con la normativa de seguridad de refrigerantes A2L. Nunca un VRV fue tan seguro.