Facility Management and Services 012

48 ENTREVISTA EFICIENCIA Y Sostenibilidad al 38% de la población del municipio de Madrid. A finales de 2016 se incorpora un nuevo indicador, el indicador de ren- ta, que se considera fundamental al objeto de la estrategia. Se apoya en los datos de renta bruta disponible per cápita del distrito y se realiza una estimación a nivel de sección censal. En 2017, con este quinto indicador de la renta y recogiendo las solicitu- des recibidas de algunas áreas para ser incluidas en el mapa, se han incre- mentado los límites de 21 de los API- RUs definidos en 2016, y se han su- mado 8 nuevas áreas, siendo en to- tal 120 APIRUs que suponen una su- perficie de 3.689 Has que afectan a 1.250.000 habitantes, lo que repre- senta el 40% de la población munici- pal. En total 590.747 viviendas. Para 2018 se estudia la posibilidad de incorporar los edificios que no estan- do en APIRU reúnan las condiciones de aquellos. Tal es el caso de edificios re- sidenciales sin rehabilitar en un ámbi- to renovado o edificios residenciales en ámbitos industriales, por ejemplo. da un 20% superior a la media mu- nicipal; 4. Porcentaje de población sin estu- dios un 20% superior a la media mu- nicipal. Se identificaron las parcelas que cumplían las condiciones 1 y 2 de an- tigüedad y valor catastral bajo, y al menos una de las condiciones 3 y 4. Es decir, del conjunto formado por las parcelas con edificación más antigua y menor valor catastral, se seleccio- nan las que además presentan alto ín- dice de envejecimiento y/o población sin estudios. Esto permitió un cierto reajuste sobre la geografía inicial con datos procedentes de Catastro y Pa- drón Municipal 2014. Durante el periodo de información pública se presentaron 43 alegacio- nes, de las que se estimaron total o parcialmente 39. Con ello, en mayo de 2016 se aprobó definitivamente el primer Mapa de APIRUs, Áreas Pre- ferentes de Impulso a la Regenera- ción Urbana, en el que se identifica- ron finalmente 112 áreas que agrupan diez hogares no pueden encender la calefacción, ni iluminarse cuando ano- chece, ante la incapacidad de pagar las facturas energéticas. Todos ellos parecían indicadores suficientes para decidir intervenir en la ciudad existente y, concretamen- te, en la corona de barrios de vivien- da social, construidos en el período entre 1960 y 1980, con tipología ma- yoritaria de bloque abierto que pre- sentan importantes deficiencias ener- géticas y de accesibilidad. Son áreas que requieren una atención priorita- ria y donde se han centrado los es- fuerzos de renovación, para avanzar en el reequilibrio social y territorial de nuestra ciudad, interviniendo donde han aumentado las desigualdades du- rante la crisis. - ¿Cuántos ciudadanos son objeto de esta estrategia y en qué zona? ¿Se expandirá? En una misma ciudad según las carac- terísticas de cada barrio surge la ne- cesidad de actuar de forma diferen- te. Según el nivel de vulnerabilidad urbana, la solución pasa por una ma- yor o menor tutela del proceso des- de la Administración y por la integra- ción de soluciones de rehabilitación atendiendo a los problemas sociales y económicos. Por ello, lo primero que se hizo fue definir lo que se ha denomina- do Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana (APIRU). En marzo de 2016 se aprobaron inicialmente 109 Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urba- na (APIRU) a partir de 4 indicadores: la antigüedad, el valor catastral de la edificación, la edad y el nivel de estu- dios de la población, con los umbra- les de corte indicados a continuación: 1. Edad de la edificación: anterior a 1980; 2. Valor catastral de la edificación un 20% inferior a la media municipal; 3. Porcentaje de población envejeci-

RkJQdWJsaXNoZXIy MzA3NDY=