La puesta en marcha de infraestructuras y tecnologías adecuadas que faciliten cambios en los edificios y lugares de trabajo, así como nuestro compromiso y comportamiento, nos permiten abordar los grandes desafíos a los que nos enfrentamos a través de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). En el contexto actual, los profesionales del Facility Management son uno de los actores que en mayor medida pueden trabajar en el cumplimiento de los ODS, ya que alcanzan a gestionar aspectos tan diversos como la sostenibilidad, el ahorro energético e incluso ciertos ámbitos de la responsabilidad e inclusión social.
La Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible fue aprobada por la ONU en 2015 con el objetivo de iniciar por parte de países, personas y empresas, un camino con el que mejorar la vida de todos sin dejar a nadie atrás. La Agenda 2030 incluye 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible u ODS que abarcan diferentes esfuerzos para crear un mundo mejor, y que van desde luchar contra el cambio climático, crear ciudades y comunidades sostenibles, hasta reducir las desigualdades sociales en todas sus vertientes.
El hecho de usar materiales de forma más eficiente, reutilizarlos, reciclar productos y minimizar los residuos figuran entre las medidas que puede tomar un Facility Manager y que suman un impacto muy positivo. Al mismo tiempo, acciones concretas como la transición y mejora de la eficiencia energética en edificios, están en nuestras manos como profesionales. Lograr emisiones cero es un gran reto al que podemos contribuir desde el Facility reemplazando combustibles fósiles por energía solar y biomasa.
Muchas de las medidas que contribuyen a la consecución de los ODS son baratas, rápidas y factibles con la tecnología actual y ofrecen beneficios adicionales, como la creación de nuevos puestos de trabajo y el tratamiento de la inequidad socioeconómica.
El adecuado diseño de espacios ajardinados y el mantenimiento de áreas verdes pueden suponer plantar más árboles y vegetación, pudiendo llevar a cabo estas funciones colectivos en riesgo de exclusión social. Como vemos, un buen profesional del Facility Management también tiene carácter inclusivo, gestionando diferentes perfiles y permitiendo el acceso al mercado laboral de personas con difícil inserción. Para eso es importante que el Facility Manager trabaje conjuntamente con administraciones, tercer sector y otras profesiones implicadas que le ayuden a identificar oportunidades y generar alianzas para impulsar las acciones necesarias para la integración de personal con diversidad funcional.
En definitiva, los ODS constituyen un buen marco de referencia y una estructura clara de objetivos comunes a nivel de sostenibilidad, economía y sociedad por los que trabajar para construir un mundo mejor. Desde el área de Facility debemos tomar la iniciativa, ya que podemos y debemos llevar a cabo una planificación y gestión desde diferentes ámbitos estratégicos: sostenibilidad, transición energética, inclusión y justicia social que permitirán alcanzar en el corto plazo los diferentes ODS, tratándose el Facility Management de una de las disciplinas desde donde transicionar hacia la consecución de los ODS.
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