CBRE ha presentado su informe sobre inversión inmobiliaria, Real Estate Market Outlook 2023, en el que predicen que el 2023 experimentará un ajuste en volúmenes de inversión, especialmente en el primer semestre del año, para presentar signos de crecimiento y recuperación durante la segunda mitad del año.
Concretamente, las nuevas proyecciones de CBRE apuntan hacia una reducción de la inversión inmobiliaria en España para 2023, de alrededor del 20%-30%. “La elevada volatilidad prevista para este año no facilitará la toma de decisiones de los inversores, que serán mucho más selectivos. La mejora del contexto macroeconómico permitirá recuperar la senda del crecimiento de la inversión a lo largo del segundo semestre, aunque dependerá de cuánto se tarden en ajustar los precios. Cuanto más nos retrasemos en este ajuste necesario, más impacto veremos en el volumen de inversión”, ha afirmado Paloma Relinque, directora de Capital Markets de CBRE España.
Respecto a los distintos sectores que monitorizan, el Living e Industrial seguirán siendo los sectores con más capacidad de atracción de inversores (el sector oficinas había sido en la última década el que lideraba este interés), y crecerá considerablemente el volumen destinado a segmentos operativos, tales como hospitales, residencias de la tercera edad, centros educativos y hoteles, entre otros.
La inversión inmobiliaria se fija en la calidad y en los criterios ESG
Elementos diferenciadores como la calidad, el ESG y la flexibilidad en usos marcarán la brecha entre los mejores activos y “el resto” tanto para ocupantes como inversores, por lo que la tendencia de polarización se verá acentuada a lo largo del próximo año. “Tanto es así que los principales indicadores de rentas y ocupación serán diferencialmente mejores en aquellos activos que destaquen frente al resto, con independencia de su tipología (edificios de oficinas de grado A, hoteles 5 estrellas y Gran Lujo, automatización en naves de última generación, etc.) y que cumplan con los mejores estándares de calidad”, según Miriam Goicoechea, Head of Research, CBRE España.
Además, los requisitos normativos seguirán endureciéndose en 2023. Prueba de ello es el reciente Reglamento de Divulgación de Información sobre Finanzas Sostenibles de la Unión Europea (SFDR). Por ello, la evaluación comparativa y la elaboración de informes serán esenciales.
Oficinas flex
En el segmento de oficinas, los buenos datos del último ejercicio auguran un buen 2023 en el que la polarización y los espacios flexibles ganarán aún más protagonismo y se verá un mercado cada vez más complejo para los activos menos actualizados, mientras que los de más alta calidad seguirán incrementando sus rentas. La desaceleración económica que esperan desde la consultora en 2023 se traducirá en una ligera reducción en las cifras de contratación, tanto en Madrid (en torno a un -5%) como en Barcelona (en torno a un -10%). Este ajuste no pondrá freno a la recuperación posterior a la pandemia, y a medio/largo plazo se espera ver cómo la contratación se recupera y alcanza cifras ya equilibradas. Las oficinas siguen en pleno proceso de transformación, con las empresas aún tratando de descifrar qué nuevas formas de trabajo son las que mejor satisfacen las expectativas del trabajador y garantizan, a la vez, la mejor respuesta para las necesidades de la propia empresa.
También el sector Logístico se mantendrá como uno de los favoritos de los inversores, principalmente por la creciente demanda y los altos niveles de ocupación. La falta de stock, la elevada demanda y los elevados costes de construcción harán que continúen creciendo las rentas, no sólo en las principales plazas. Los nuevos proyectos tratarán de cumplir los requisitos de automatización y sostenibilidad cada vez más indispensables para el cierre de operaciones.
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