Llega el buen tiempo y, con él, un mayor uso de los aparatos de aire acondicionado. Por eso, la Asociación de Empresas del Sector de las Instalaciones y la Energía (Agremia) aconseja adoptar una serie de medidas para garantizar su adecuado funcionamiento.
Para empezar, desde esta Asociación recuerdan que los sistemas de aire acondicionado son equipos seguros. De hecho, permiten reducir la propagación del coronavirus en espacios interiores, aunque este verano todavía es recomendable no usar los modos de recirculación del aire. Según Inmaculada Peiró, directora General de Agremia, “con frecuencia se piensa que los aparatos de aire acondicionado, en particular los que no son portátiles, son meros electrodomésticos, y no es así. Se trata de equipos que forman parte de la instalación térmica de la vivienda. Por tanto, su instalación, uso y mantenimiento están sometidos a la normativa en materia de seguridad y calidad industrial”. De ahí que estas operaciones de instalación y mantenimiento solo pueden ser realizadas por empresas instaladoras o mantenedoras habilitadas.
Recomendaciones de Agremia para los aparatos de aire acondicionado
- Comprobar que las conexiones eléctricas que alimentan el equipo están en buen estado. Desde la asociación aconsejan revisar que el cableado no está en malas condiciones o que no están conectados a regletas junto con otros aparatos. Estas pueden no soportar la intensidad de todos los elementos. En consecuencia, se pueden producir calentamientos o cortocircuitos que pongan en riesgo la seguridad.
- Revisar que los circuitos frigoríficos están debidamente aislados. Un aislamiento inadecuado o un deterioro ocasionado por los años provocará una pérdida de energía y, por lo tanto, un mayor consumo eléctrico.
- Limpiar regularmente los filtros de aire del aparato de aire acondicionado, que suelen ser fácilmente accesibles. El uso continuado de los aparatos y el paso del tiempo hacen que dichos filtros se obstruyan perjudicando la eficiencia del equipo. Además, es conveniente limpiar estos filtros dos veces al año y su sustitución periódica para que la calidad del aire interior sea óptima.
- Tener en cuenta la normativa existente. En este caso, el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) establece que los aparatos de aire acondicionado, o las bombas de calor con potencia inferior a 12 kW, deben ser objeto de un mantenimiento preventivo cada cuatro años, si son de uso doméstico, o cada dos para cualquier otro uso; o bien con la periodicidad indicada por el fabricante en el manual de uso y mantenimiento del equipo.
- Realizar un uso responsable de los equipos, evitando que no se dispare la factura de la electricidad por un consumo excesivo. En este sentido, Agremia recuerda que, a partir del 1 de junio, entran en vigor las nuevas tarifas. Con ellas, el usuario tendrá que cambiar sus hábitos de consumo. Se reduce el término fijo, pero el término variable (lo que se consume) puede verse incrementado considerablemente según el horario en que se produzcan los consumos.
Temperatura aconsejada
Finalmente, también hay que tener en cuenta las recomendaciones de temperatura del Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE). Según este, los equipos se deben programar entre 24 y 25 grados en verano o cuando los aparatos se utilizan en modo refrigeración; y entre 21 y 22 grados en invierno o cuando se usan en modo calefacción.
Archivado en:
