Según un reciente estudio realizado por la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) se evidencia el papel esencial llevado a cabo por las empresas de sanidad ambiental durante la crisis del coronavirus y se constata la revalorización del sector tras la pandemia.
Este informe destaca también el importante rol que las empresas de sanidad ambiental desempeñan en la economía española, dada su capacidad para generar empleo. Pronostica, además, un crecimiento del sector por encima de la media española.
La pandemia por coronavirus que llevamos sufriendo desde hace prácticamente ya un par de años ha cambiado muchas cosas. Entre ellas, nuestra percepción de la salubridad en los espacios, tanto públicos como privados. Lejos parecen quedar aquellos tiempos en los que nos sentábamos en una mesa de una cafetería que no había sido previamente desinfectada o entrar a un espacio cerrado sin cuestionarse el sistema de ventilación y renovación del aire.
Desde que en el año 2020 el Covid-19 entrara en nuestras vidas y condicionara hasta el extremo todos nuestros gestos cotidianos, no hay duda de que la sensibilización social generalizada con respecto a la salubridad de los espacios se ha disparado. En este sentido, el papel desempeñado por las empresas de sanidad ambiental al comienzo de la pandemia fue fundamental. En un momento en que muchos trabajadores se negaban incluso a acudir a sus puestos de trabajo sin una desinfección profesional exhaustiva previa, el trabajo de estos profesionales fue esencial -y así fue decretado por el Gobierno en los inicios de la crisis sanitaria-.
Aumento de plagas durante el confinamiento
Tras el confinamiento, las noticias que señalaban un aumento de las plagas de roedores, cucarachas, garrapatas, mosca negra, etc. no pararon de sucederse. Este «efecto colateral» del confinamiento se dio por dos motivos. Por un lado, la ausencia de presencia humana en los espacios públicos y los comercios cerrados. Y, por otro lado, la no realización de los tratamientos de mantenimiento habituales. Un problema que se solucionó una vez más gracias al compromiso y la profesionalidad del sector de la sanidad ambiental, que, tal y como recuerdan desde ANECPLA, lleva en su ADN la “salvaguarda de la calidad de vida de la ciudadanía”.
En etapas posteriores y en la actualidad, uno de los aspectos centrales de la prevención frente al coronavirus se ha volcado en la Calidad del Aire en Interiores (CAI), un servicio que se aborda igualmente desde el sector de la sanidad ambiental.
Por todo ello, no es de extrañar que el sector de la sanidad ambiental se haya revalorizado en gran medida desde la pandemia. Así lo ha constatado el reciente estudio de ANECPLA ‘La relevancia socioeconómica del Sector de Sanidad Ambiental en España’, llevado a cabo por la consultoría independiente Analistas Financieros Internacionales (AFI).
Crecimiento del sector de la sanidad ambiental
Además la consultora prevé un crecimiento económico del sector en los próximos años superior a la media española. Concretamente, según las previsiones realizadas por AFI, mientras que se espera que la economía española crezca una media anual de en torno a un 3,6% hasta 2023, se prevé que el sector de la sanidad ambiental lo haga con un incremento del 9%.
Una diferencia positiva más que notable que se explica debido al gran cambio de mentalidad de la sociedad tras la pandemia, que ha conducido a una sociedad más sensibilizada con la salubridad de los espacios, en concreto, y con la sanidad ambiental, en general.
Un cambio de mentalidad que desde ANECPLA, tal y como afirma su director general Jorge Galván, “supone un reconocimiento a la labor de servicio público que desde siempre han llevado a cabo las empresas del sector y que por fin parece que comienza a visibilizarse. Una labor que sin duda ha quedado muy patente con la pandemia por coronavirus pero que este sector realiza diariamente, ejerciendo de cinturón de seguridad de los ciudadanos con el objetivo de garantizar su bienestar su calidad de vida”.
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