A finales del año 2022, la app multicategoría Glovo inauguró una nueva sede central en la ciudad de Barcelona.
Glovo eligió para su ubicación la zona empresarial MILE22@, concretamente el eje de Badajoz, por ser un lugar destacado en la ciudad de Barcelona para el impulso empresarial. El distrito 22@ es la zona empresarial más dinámica de la ciudad condal.
El campus de Glovo en Barcelona es conocido con el nombre de Yellow Park. “Ha sido diseñado para reflejar una parte esencial de Glovo”, nos comenta Javier Vallés, Global Real Estate Manager de Glovo. Vallés se refiere a que su diseño refleja la apuesta por el talento, el trabajo en equipo, la colaboración y la creatividad. Con la apertura de esta nueva sede se pone en valor, además, “la clara apuesta de Glovo por Barcelona y el conjunto del país”.
Con esta decisión, la compañía hizo y sigue haciendo una inversión en la ciudad de Barcelona, ciudad donde precisamente nació. El objetivo es seguir “generando impacto y colaborando para impulsar el crecimiento, la digitalización y la innovación del ecosistema digital”, comenta Vallés.
Desde el primer día, “Glovo eligió instalar sus oficinas en la zona 22@ de Barcelona, un área estratégica por su dinamismo y ubicación privilegiada.
En casi diez años de historia hemos estado en cinco sedes que iban cubriendo la necesidad de nuestro crecimiento acelerado. En todas ellas, hemos apostado por 22@, hub tecnológico europeo, haciendo de Poblenou un lugar ideal para atraer y retener talento”, prosigue el Real Estate Manager de Glovo en Barcelona.
El campus Yellow Park cuenta con más de 30.000 metros cuadrados de superficie distribuidos en dos edificios de 7 y 10 plantas. Se trata de un complejo eficiente y respetuoso con el medio ambiente que cuenta con sistemas de ahorro energético, generación de energía renovable a través de paneles solares, un sistema de filtrado del aire de alta eficiencia y un ahorro de consumo de agua del 57%.
El campus, además, cuenta con la certificación LEED® Platinum Core & Shell, ya que los edificios están dotados de todo lo necesario para dicha certificación, incluyendo placas solares, el sistema Districlima y canales de reciclaje.
Según Olga de Mena, People Experience en Glovo, “hemos aprovechado este primer año para centrarnos en los eventos internos. Ahora, después de construir los espacios de anfiteatro en el segundo edificio, hemos abierto la posibilidad de realizar eventos para el barrio e invitar a otras empresas y socios”.
¿Cómo es el campus?
Respecto a sus características arquitectónicas, el campus se construyó gracias al estudio de arquitectos BCA. El estudio buscaba recordar la esencia de Barcelona, del tejido industrial del Poblenou, junto a la experiencia de vivir cerca del Mediterráneo. Así pues, el complejo de oficinas es moderno, integral, sobrio y versátil; evoca al barrio, a las personas, a los materiales industriales y a la naturaleza.
El campus Yellow Yard se ubica en la misma manzana de la emblemática fábrica de Industrias Waldes. Para estar en consonancia con el entorno, el campus se estructura en dos edificios que juegan con plazas, pasillos, terrazas y rincones para diluir su gran tamaño y acercar a las personas.
Estos dos edificios producen la sensación de estar en una pequeña ciudad, llena de rincones para trabajar, socializar o pasar el tiempo. La naturaleza lo rodea todo: jardines, dunas y grandes árboles.
En su interior podemos encontrar distintos espacios para facilitar el trabajo colaborativo y privado o individual. La premisa principal es el uso de open space, lugares en los que no hay despachos privados, ni salas para equipos. Este diseño responde a la visión de que todos los empleados son tratados de la misma manera.
Asimismo, existen los Pools de mesas pegados a la fachada para favorecer la iluminación natural. Y los Meeting rooms en el interior, ubicados generalmente en torno a los núcleos verticales.
Según Javier Vallés, se pretendía ofrecer a los empleados diferentes tipologías de espacios de trabajo, desde el tradicional pool de desks, a disposiciones más dinámicas y colaborativas.
Por otro lado, se han implementado espacios de trabajo informales a los que llaman open spots. Estos son fáciles de encontrar, están dispuestos en cualquier parte de la oficina y se accede a ellos sin reserva previa.
Finalmente, “quisimos otorgar a cada planta un amenitie diferente: Focus room, Meditation room, Librería, gimnasio, etc.”
Todos estos espacios están pensados para mejorar la experiencia del empleado, incrementar su satisfacción y bienestar. De esta manera, hay espacios más populares que otros como: el Gimnasio, con sus máquinas, pesas y pared de escalada; el Meditation room, que fomenta el bienestar psicológico; la guardería, que fomenta la conciliación familiar; los Breastfeeding rooms y Playroom; el servicio de cafetería externalizado; y el servicio de cantina externalizado.
En este sentido, para incidir en el bienestar de los empleados, también ayuda que estos edificios están aislados y disponen de iluminación natural.
“Actualmente, -relata Vallés- somos 1.400 empleados en Barcelona, con una media de edad de aproximadamente 32 años, predominando un perfil joven aunque diverso. Alrededor del 40% de estos empleados tiene perfiles tecnológicos, como ingenieros, Product Managers y diseñadores UX. Además, contamos con otros departamentos clave para el funcionamiento de la app, siendo Operaciones el segundo equipo más grande, seguido de áreas como Finanzas, Recursos Humanos y Marketing”.
En cuanto a facilitar la movilidad y el acceso al campus, el edificio está bien conectado, con acceso cercano al transporte público y opciones de movilidad sostenible que facilitan el acceso a todo el personal.
Concretamente, su ubicación permite a los empleados contar con unos interesantes beneficios de accesibilidad. En las inmediaciones del complejo empresarial de Glovo en Barcelona hay multitud de carriles para bicicletas y zonas de aparcamiento en menos de 100 metros. Cuentan con una parada de metro a menos de cinco minutos andando; disponen también de estaciones de autobús y cerca se encuentran varias líneas de tranvía, lo que mejora las opciones de movilidad inteligente y sostenibles.
Además, disponen de un parking con cargadores eléctricos y parking de micromobility.
Gestión de los servicios y la experiencia del empleado
En el campus Yellow Park la tecnología juega un papel fundamental para gestionar los servicios y la experiencia del empleado en la oficina
En este complejo de edificios han implementado un sistema centralizado de gestión mediante Jira, una herramienta interna de ticketing. “Con Jira, consolidamos en un solo canal tanto las incidencias reportadas por los empleados como las nuestras, lo que facilita una administración eficiente y el seguimiento de cada caso hasta su resolución”, explica Belén Maggi, Workplace Lead en Glovo.
Además para asegurar la calidad de servicios como la limpieza, el mantenimiento o la seguridad disponen de personal propio. Para limpieza, “contamos con equipos dedicados por planta y dos supervisoras que realizan inspecciones diarias para asegurar que todas las tareas se cumplen con el nivel esperado”.
En mantenimiento, trabajan con equipos internos y proveedores externos. “Nuestro equipo se encarga de todo lo relacionado con el fit-out propio”, mientras que el equipo externo gestiona el mantenimiento de las zonas comunes y cualquier incidencia escalada.
En cuanto a seguridad, el edificio proporciona vigilancia las 24 horas. Además, “hemos añadido personal de seguridad propio para todas las recepciones y el estacionamiento, cubriendo de manera integral todas las áreas comunes”.
Volviendo a la tecnología implantada para la gestión de la experiencia de los empleados en la oficina, en los edificios se han instalado sensores volumétricos para el apagado automático de meeting rooms y open space, cuando ya no se detecta presencia. Otros sensores se usan para liberar la disponibilidad de la sala si el sistema detecta que la reunión ha terminado tras 10 minutos de no detección de movimiento.
Por otra parte, existen los booking panels situados a la entrada de las salas de reuniones, sincronizados con el calendario general y accesible para todos. Además, estas pantallas sirven para ver la disponibilidad de la sala durante el día, y permiten bloquear la sala manualmente en caso de estar disponible.
Todo esta tecnología que permite extraer información en tiempo real, a través de sistemas de control y monitoreo, tienen también un objetivo de eficiencia en la gestión operativa del edificio, ya que “el edificio se diseñó con sensorización volumétrica en open space y salas de reuniones con el fin de reducir el consumo de energía a lo estrictamente necesario”.
El complejo también logra ser sostenible gracias a medidas implementadas como las mencionadas anteriormente: placas solares; cargadores eléctricos en parking, reciclaje de aguas grises para riego, etc.
Asimismo, “aparte de que todas las plantas tienen centros de reciclaje para mejorar la categorización de los residuos, también disponemos de un taller de reparación para material electrónico de oficina, alargando la vida útil de los PCs y pantallas”, insiste Víctor Enciso, responsable de Medioambiente.
De esta manera, han logrado reducir el uso de recursos como el agua o la energía utilizada, y cuentan con el correspondiente certificado que avala su apuesta por la eficiencia y la sostenibilidad (Certificado Leed Platinum).
Para terminar nuestra entrevista, hemos querido preguntar a Javier Vallés por el papel del Facility Management en la sede de Glovo en Barcelona. En este sentido, Javier Vallés resalta su papel en la adecuación del espacio en el que trabajan según las necesidades cambiantes de la compañía. “Hemos afrontado obras de densificación debido al cambio de política de asistencia a la oficina, creación de nuevas salas de reuniones, creación de auditorios. Hemos sido capaces de adaptarnos a las necesidades cambiantes de la compañía, y a aprender de los errores, corrigiendo lo que con el tiempo hemos visto que no ha funcionado”.
Ésta es sin duda la prueba de la importante labor del FM en una compañía, gestionando en tiempo real para lograr la máxima eficiencia operativa sin desmerecer el bienestar de las personas.
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