La descarbonización es el proceso de reducir o eliminar las emisiones de dióxido de carbono (CO₂) y otros gases de efecto invernadero asociados a actividades humanas, especialmente aquellas relacionadas con la producción de energía, transporte e industria. Este esfuerzo busca mitigar el impacto del cambio climático mediante la transición hacia fuentes de energía renovable, tecnologías limpias y prácticas sostenibles que disminuyan la dependencia de los combustibles fósiles. Aplicar esta medida al sector residencial es fundamental para alcanzar los objetivos globales de sostenibilidad y limitar el aumento de la temperatura global.
El proceso de reducción progresiva de las emisiones en España requiere un enfoque coordinado que combine políticas públicas, innovación tecnológica y un cambio cultural hacia un consumo más responsable y eficiente. Solo así será posible reducir las emisiones y avanzar hacia un futuro sostenible. La descarbonización del sector residencial en España es un desafío fundamental para alcanzar los objetivos climáticos establecidos en el Acuerdo de París y en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética.
Por qué la descarbonización es un desafío para el sector residencial
El sector residencial acumula aproximadamente el 20% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero del país, por el consumo energético en calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria. Para reducir estas emisiones, debe haber unas medidas integrales que combinen eficiencia energética, electrificación y el uso de fuentes de energía renovable.
Una de las principales estrategias es la rehabilitación energética de edificios. En España más del 80% del parque residencial se construyó antes de la implementación de normativas de eficiencia energética, lo que significa que gran parte de las viviendas tiene un elevado consumo energético. Programas como el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia incluyen incentivos para la instalación de aislamiento térmico, ventanas de alta eficiencia y sistemas de calefacción y refrigeración más sostenibles, como bombas de calor.
La electrificación también juega un papel clave en este proceso. La transición hacia sistemas eléctricos que utilicen energía de origen renovable, como la solar o la eólica, es crucial para eliminar gradualmente el uso de combustibles fósiles. Además, la instalación de paneles solares fotovoltaicos en edificios residenciales se está promoviendo activamente, gracias a subvenciones y la eliminación de barreras como el «impuesto al sol».
La participación ciudadana es otro factor esencial. La sensibilización sobre el impacto ambiental y los beneficios económicos a largo plazo de la eficiencia energética puede acelerar la adopción de medidas sostenibles en el sector residencial.
El rol del Facility Management en la descarbonización
Para lograr una renovación eficaz de los edificios españoles debe abordarse la falta de recursos económicos de las pequeñas comunidades de propietarios. Los Fondos Next Generation y las políticas públicas permiten la tramitación y el inicio de las rehabilitaciones. Pero algunas comunidades vecinales y pequeños propietarios deben cubrir una parte de los gastos operacionales.
Mediante la monitorización y la digitalización que emplea el Facility Management se optimiza la gestión energética del inmueble. Esto permite recibir información en tiempo real sobre el consumos y el volumen de emisiones de cada edificio.
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