La mejora de los estándares de construcción y el diseño de edificios más sostenibles están produciendo nuevos edificios más saludables y eficientes, desde el punto de vista energético. Sin embargo, los materiales aislantes de mayor calidad y los nuevos tipos de vidrio son prácticamente impermeables a las señales de telefonía móvil. Y esto puede ser un gran problema.
La calidad y la experiencia con conectividad móvil preocupan mucho a los Facility Managers. No sólo es indispensable garantizar que todos los empleados puedan hacer y recibir llamadas de móvil en cualquier lugar del edificio, sino que la conectividad móvil es de vital importancia para impulsar la eficiencia y funcionalidad de tantos sistemas críticos en un edificio inteligente. Sensores como los que miden la ocupación, el consumo de energía y agua o alertan de problemas de mantenimiento y seguridad dependen de una conectividad robusta.
Aunque se pueden hacer llamadas de teléfono móvil a través de una red Wi-Fi, este tipo de llamadas tienen sus desventajas. Para poder hacer llamadas wifi con éxito es imprescindible estar conectado a una red estable y sólida. Sin embargo, las redes Wi-Fi se congestionan -especialmente cuando las utilizan varios dispositivos- y esto compromete la conectividad y, por tanto, la calidad de la llamada. Además, es posible que no proporcionen una localización exacta a los servicios de emergencia en caso de urgencia. Desde un punto de vista práctico, no todos los modelos de teléfono y operadores admiten llamadas por Wi-Fi, y el uso de este tipo de llamadas puede agotar la batería más rápido que si realizamos llamadas por móvil. Si además tenemos en cuenta que las redes Wi-Fi pueden ser vulnerables a los hackers, está claro que depender de las llamadas Wi-Fi no es lo más adecuado para las empresas.
Ya no forma parte del modelo de negocio de los proveedores de redes móviles asumir la responsabilidad de mejorar la conectividad móvil en los edificios. Las empresas tienen que encargarse de ofrecer su propia conectividad móvil y ahora hay innovaciones y nuevos modelos empresariales que hacen que su implementación sea sencilla y rentable. Shared Access es una empresa de infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas que trabaja con operadores de redes móviles y propietarios de edificios para financiar, diseñar, instalar y gestionar sistemas que ofrezcan una excelente conectividad móvil en todo tipo de edificios.
Shared Access se acaba de encargar del desarrollo de una solución de host neutral para la instalación de infraestructura de conectividad móvil en las nuevas oficinas de la prestigiosa National Gallery de Londres.
La National Gallery transformó lo que había sido, hasta ese momento, un patio vacío en un nuevo espacio de oficinas, el One Gallery Hub. Se diseñó para que contara con siete plantas de espacios de trabajo inspiradores, colaborativos y eficientes para los más de 250 empleados de la galería, así como para los que teletrabajan. La National Gallery necesitaba cobertura móvil continua desde el sótano hasta la sexta planta y una solución funcional que cubriera todo el edificio con poco mantenimiento.
Es un nuevo espacio de oficinas espectacular, pero, como tantos otros edificios, sufría de mala cobertura de telefonía móvil. Esto se debía a una combinación de muros originales de piedra y ladrillo de cerca de 2 metros de grosor, materiales de construcción muy aislantes que básicamente repelen la señal telefónica del exterior y el crecimiento de los edificios de los alrededores, que impedían que la señal telefónica llegara al edificio.
Shared Access ganó el concurso para suministrar la infraestructura de conectividad que ofreciera cobertura móvil en todas las oficinas, zonas comunes y salas de reuniones del sótano. El objetivo era garantizar la eficiencia operativa de los equipos y las personas que trabajan en el Hub, así como de quienes lo hacen a distancia.
Un reto importante era la falta de espacio en la National Gallery para alojar el equipo in situ. Además, como la National Gallery es un edificio protegido de grado 1, la solución también tenía que ser estéticamente adecuada al entorno.
En Shared Access trabajamos en colaboración con The National Gallery y todos los operadores de redes móviles para superar estos obstáculos técnicos. Nuestro innovador planteamiento utiliza un hotel BTS (hotel como estación base), una de las primeras aplicaciones comerciales de este tipo. Esto significa que, el amplio equipo de telecomunicaciones necesario para dar servicio a la conectividad está situado en un lugar seguro fuera de las instalaciones y conectado a la National Gallery a través de una conexión de fibra oscura. El hotel BTS ya abastece a otros emplazamientos londinenses, lo que supone un ahorro considerable de costes y energía.
La inversión ha permitido mejorar significativamente la señal de telefonía móvil para todos los operadores de redes móviles en todo el edificio, incrementando velocidades y tasas de datos. El sistema tiene potencial para ampliarse a otras partes de la Galería y se diseñó para poder ofrecer servicios 5G en el futuro.
La mejora de la conectividad móvil en las oficinas de la National Gallery ha reportado grandes beneficios. Ha mejorado el estado de ánimo de los empleados, que tiene la tranquilidad de poder utilizar su móvil en cualquier momento mientras trabaja, y ha aumentado la productividad. También ha mejorado mucho la ocupación de las salas de reuniones y las zonas de descanso del sótano, que antes estaban infrautilizadas porque no ofrecían cobertura móvil.
Como uno de los principales proveedores europeos de conectividad móvil en edificios, nos asociamos con nuestros clientes a largo plazo para financiar, diseñar, instalar, supervisar y mantener la conectividad móvil mediante una cuota anual. Y, sí, eso significa que nuestra solución no requiere ninguna inversión de capital inicial por parte de nuestros clientes.
